INFORME21
Ahora, radicando desde México, país que desde 
siempre la ha recibido con los brazos abiertos, Lupita Ferrer se prepara para 
volver a las telenovelas en "Rosa Diamante" con un personaje fuerte, una
 villana arrogante y soberbia de nombre 'Rosaura Sotomayor'. Proyecto al
 que no pudo decir que no, aún antes de conocerlo, cuando recibió la 
propuesta de parte de Telemundo...
"Dije que sí espontáneamente. 
Pero luego que leí, empecé a leer, yo no sabía ni siquiera de qué se 
trataba. Luego empiezo a leer el proyecto y me doy cuenta, Dios mío si 
esto me recuerda, tiene aires de las grandes novelas mías del pasado, de
 un poco de 'Esmeralda', un poco de 'Cristal', hecha por un gran 
escritor argentino que se llama Enrique Torres y es un maravilloso 
personaje; estoy contenta de estar acá", nos cuenta en exclusiva a 
HuffPost Voces.
Pero Lupita nos dice que más que mala, Rosaura 
Sotomayor "es un personaje de estos endurecidos por la vida, amargada, 
una mujer millonaria y tú sabes que en ese círculo social se maneja esa 
dureza de los empresarios, una mujer que la mueve más que nada el dinero
 y el poder, como a todos los personajes. Esta no es una novela de ricos
 y pobres, no. No es la novela clásica de la muchacha pobre que se 
enamora del hombre rico, no. Somos todos millonarios, incluyendo la 
protagonista. Entonces aquí se maneja una lucha de poder, de dinero, 
todos quieren adueñarse de las empresas, es una lucha reñida pero muy 
contemporánea, es muy moderna. Porque en el mundo de hoy parece como si 
el amor quedara en segundo plano, parece como que si fuera el dinero lo 
que moviera a la gente." Una mujer que a lo largo de la historia veremos
 llena de matices, ya que "tiene un lado muy frágil de su personalidad 
que le causa enorme dolor. No es la clásica villana, que es villana 
porque sí. Es bonito el personaje porque tiene cambios, tiene matices y 
la actuación en sí, tiene grandes monólogos, diálogos importantes, yo no
 conocía a este escritor pero sin duda alguna es muy bueno", nos cuenta.
Sin
 embargo, en medio de toda esta emoción que siente por este personaje y 
por la oportunidad de volver a trabajar con Argos y en específico al 
lado de Epigmenio Ibarra, a quien recuerda con gran cariño por la 
telenovela "Nada Personal", Lupita Ferrer acepta que "me he concentrado 
quizá hasta demasiado en mi vida profesional y no ha sido en un afán de 
dinero o de protagonismo, ni nada, es como una necesidad que yo tengo 
por dentro de actuar, de expresar lo que siento, yo soy artista de 
corazón, me gusta". Y es que aunque actualmente se encuentra en una 
relación, Lupita hizo sus maletas y le dijo que sí al trabajo, pues 
considera de no haberlo hecho "lo hubiera lamentado toda la vida"...
"Creo
 que es una oportunidad de nuevo, de hacer un protagónico importante en 
la televisión que tú sabes que para las mujeres maduras no hay tantas 
oportunidades, generalmente las mujeres maduras no somos en la 
televisión las figuras principales, salvo en los Estados Unidos que sí 
lo he visto, hasta eso es una cosa innovadora acá. Porque acá los 
personajes de gente madura y sobre todo el mío es protagónico". Lo que 
no quiere decir que esa mujer segura de sus decisiones, amante del arte,
 de la música, de la lectura, de la naturaleza, no llegue a reflexionar 
de repente en los aspectos que ha descuidado por esa pasión a su 
carrera, como por ejemplo una vida estable y en familia, y que acepta de
 poder hacerlo lo cambiaría...
"Claro que lo haría. Ese aspecto 
de mi vida personal que no he logrado tener un matrimonio estable, tener
 hijos, aunque claro ya tener hijos es imposible para mí pero no sé, 
quizá la adopción es una vía, no sé. Pero por lo menos en ese aspecto de
 mi vida personal me gustaría encontrar una estabilidad". Para 
finalmente, de manera franca y honesta confesarnos que si de algo se 
arrepiente es de no haber sido mamá...
"Me hace falta como a 
todas las mujeres pero, por otro lado, yo vengo de aquella generación 
donde nos enseñaron que los hijos tenían que ser fruto de un matrimonio,
 yo no podía concebir tener un hijo de madre soltera, yo no podía 
concebirlo y hoy en día yo veo muchas mujeres que tienen hijos así. 
Quizá si yo estuviera joven en este momento haría lo mismo, no sé. Pero a
 mí en ese momento, me entorpeció un poco la vida. No lo quería y cuando
 estuve casada no tuve los hijos", nos dijo.